Opinión prueba Volkswagen Golf TDI 115 CV 2022: gran opción

2022-10-14 21:43:00 By : Mr. kata zhilemei

Se escribe “Golf” y se pronuncia “éxito”. Al menos es de lo que uno puede percatarse en lo que dura un barrido de todas sus generaciones. Albergan casi 50 años de historia. Es de los compactos con mayores cifras de venta y la elección predilecta como compacto. Hoy probamos el Volkswagen Golf TDI 115 CV en uno de sus acabados más sencillos.

Desde su introducción en 1974, hay quien dice que los términos ‘Golf’ y ‘Volkswagen’ son dos miembros distintos de una misma familia. En sus inicios, era uno de esos coches dirigido a las necesidades de un público joven que buscaba una forma de transporte barata, fiable y, sobre todo, práctica; idea que ha ido evolucionando inevitablemente con el paso de los años.

Desde los ‘70, todos los demás compactos han tenido que competir con ocho generaciones del Golf. Una vez más, el nuevo modelo ofrece una extensa lista de mecánicas y acabados para todos los gustos. Hay versiones tan racionales como emocionales, unos acabados que superan incluso a los de algunos compactos del segmento premium y una polivalencia reseñable.

El único ‘pero’ es su precio. Está por encima de la media, pero los más de 45 años de experiencia que le avalan en el mercado vuelven con fuerza en el nuevo Mk8. Rivaliza con modelos del segmento C como los KIA Ceed, Peugeot 308, Hyundai i30, Ford Focus, Toyota Corolla, Renault Mégane, SEAT León, Clase A, Serie 1 y Audi A3.

Desde el estreno del primer Golf hace 45 años, este modelo ha sido siempre un vehículo que ha sabido combinar una elevada versatilidad para el día a día con un diseño claro y preciso. El nuevo Golf mantiene esta tendencia y su diseño exterior nos recuerda al MK7. Sin embargo, se ha hecho aún más anguloso, musculoso y cuenta con novedades del actual diseño de la marca.

En la vista frontal destaca la horizontalidad de las líneas. Los detalles cromados se complementan con las entradas de aire superior e inferior. La superior está presidida por el logo de grandes dimensiones. La escoltan en sus extremos los tecnológicos faros LED matriciales opcionales IQ.Light (hay tres faros disponibles) con intermitentes dinámicos.

Estos cuentan con esa característica luz diurna LED de serie que tan atractivo hace al modelo. Los faros IQ.LIGHT incluyen Matrix LED con luz de conducción diurna LED. Suman el asistente dinámico de luz de carretera Dynamic Light Assist con luz de curva dinámica; grupos ópticos traseros LED e intermitentes dinámicos delanteros y traseros.

La entrada de aire inferior queda integrada en el paragolpes, entre los dos embellecedores laterales. Tampoco podemos olvidar el marcado capó en forma de ‘V’ que culmina en una generosa luna delantera. En dimensiones, el nuevo Golf MK8 es ligeramente más largo, un poco menos ancho y algo más bajo.

Hablamos de 4,28 metros de largo, 1,79 metros de ancho y 1,46 metros de alto. La batalla mide 2.636 mm y las vías delantera y trasera 1.549 y 1.520 mm, respectivamente. El coeficiente aerodinámico es de 0,28. La vista lateral está protagonizada por una amplia superficie acristalada -con las lunas traseras oscurecidas- que garantiza una buena visibilidad.

El área de las puertas es limpia. Estas cuentan con un tamaño razonable para garantizar un buen acceso al interior. Además, el grado de apertura es excelente. El elemento de diseño como seña de identidad es el pilar C característico del Golf. Dinamiza la carrocería hacia delante, densifica el cuerpo hacia atrás y transfiere el icónico gráfico del Golf original al presente.

También se caracteriza por unos potentes hombros y una línea de carácter a media alturaLos espejos retrovisores integran los intermitentes y ofrecen plegado eléctrico opcional. Llenando los pasos de rueda vemos unas llantas de aleación de 17 pulgadas opcionales. Están calzadas con neumáticos Bridgestone Turanza T005 en dimensiones 225/45 R17 91W en ambos ejes.

Hay disponibles nueve colores exteriores para la carrocería. Podemos encontrar tonos clásicos y diversos acabados: uniforme, perlado o metalizado. En este caso tenemos Plata Réflex metalizado. Visto desde arriba, cuenta con una antena de tipo aleta de tiburón y se puede equipar un techo solar practicable de cristal opcional.

En la zaga, la horizontalidad vuelve a estar presente. Cuenta con un generoso portón que divide las bonitas ópticas LED en dos partes. Llaman especialmente la atención elementos como el spoiler superior con la tercera luz de freno; el logo en posición central bajo el que se esconde la cámara de marcha atrás y el difusor trasero con escapes simulados en cromado.

El nuevo Golf cuenta con un interior mucho más moderno. En él encontramos multitud de instrumentos digitales, lo que compone un auténtico «Digital Cockpit». Destacan especialmente el nuevo volante multifunción, la instrumentación de 10.25 pulgadas y un sistema de infotainment con pantalla táctil de 8.25 pulgadas y conexión on line de serie.

Es cierto que tanta digitalización requiere cierto período de adaptación. Sin embargo, en Volkswagen han sabido hacer bien el trabajo al crear un conjunto muy intuitivo. Por otra parte y, como en sus predecesores, la sensación de calidad sigue siendo elevada. Pese a ser el acabado más sencillo, todo está bien rematado y hay materiales de calidad.

Vemos mucha calidad a bordo y se percibe en casi todos los elementos y ajustes. Encontramos superficies blandas en las partes altas y plásticos rígidos en las zonas bajas. Por el contrario, merece un punto negativo el uso abundante de superficies en el sucio y sensible negro brillante. Tampoco convence que se vea la pintura exterior en el marco interior de la puerta.

Llama la atención que esas líneas de corte horizontal que la marca ha querido plasmar en el exterior vuelven a estar presentes en el habitáculo. El salpicadero, ahora mucho más descargado de botones, es un claro ejemplo de ello. En este nos topamos con una elegante moldura a la altura de las salidas de aire. Pretende separar el salpicadero en dos partes.

Prácticamente todas las funcionalidades las asume la nueva pantalla a todo color, táctil, con sensores de proximidad y control gestual. Las funciones esenciales del climatizador dual (trizona opcional) y los ajustes de volumen del sistema multimedia se han dejado fuera. Quedan junto con otras funciones básicas que se agrupan en torno al botón de los “warning”.

Encontramos dos sistemas de infoentretenimiento, ambos de la familia MIB3 de Volkswagen. Tienen conectividad para Android Auto y Apple CarPlay (inalámbrico). El sencillo tiene una pantalla táctil de 8,25 pulgadas y un mando giratorio en cada lado. El Discover Pro tiene una pantalla táctil de 10 pulgadas y una superficie táctil debajo. Es la que vemos en este caso.

El control por voz es novedad en el Golf, pero no destaca por su buen funcionamiento.

A pesar de que requiere cierta adaptación, el nuevo MIB3 es un sistema de mucha calidad. En él podemos configurar, trastear y disfrutar mucho de todos los sistemas que equipa el modelo, tanto de forma opcional como de serie. No solo es más intuitivo, sino que también se han mejorado notablemente los gráficos, la sensibilidad y la fluidez.

Continuando por el túnel de trasmisión, nos encontramos con dos tomas USB-C y un hueco portaobjetos. En él se ubica la carga inalámbrica para el smartphone opcional. Le siguen el botón de arranque, la palanca de cambios (o el nuevo selector de cambio en los DSG), el freno de mano eléctrico, el Auto Hold y un hueco para pequeños objetos.

En una posición más retrasada quedan los posavasos y la toma de 12V. Estos carecen de una cortinilla para cubrirlos. La consola central culmina en un reposabrazos deslizable y ajustable en altura. En su interior se esconde una guantera de tamaño medio. A ambos lados encontramos dos cómodos y generosos asientos con un mullido confortable para largos viajes.

Si optamos por los asientos opcionales ergoComfort tenemos más funcionalidades. Cuentan con reglajes eléctricos, memoria, masaje y calefacción. También podemos variar la altura y el apoyo lumbar. Encontrar la postura adecuada es fácil por los múltiples ajustes que ofrecen. También tenemos la posibilidad de ajustar el cinturón en altura, algo cada vez menos presente.

Como gran novedad, el Golf permite equipar un Head-Up Display.

Una vez acomodados, las manos se posan sobre un ergonómico, suave y funcional volante de tres radios. Desde este que podemos ajustar decenas de sistemas gracias a los botones que integra. Tras el mismo nos encontramos con el nuevo cuadro de instrumentos digital y personalizable. La pantalla es de 10,25 pulgadas de serie (más pequeña que en el MK7).

La información que permite visualizar es realmente abundante. Pese a ello, no es mayor que en la de su predecesor. Tampoco los gráficos, el nivel de personalización o las transiciones entre visualizaciones han mejorado de manera notoria. Eso sí, son tan buenos como antes. Hay dos sistemas, el básico y el Innovision Cockpit más potente.

Respecto a la habitabilidad, hay que señalar que el acceso a todas las plazas es cómodo. El ángulo de apertura de las puertas está en la media del segmento. El espacio para las piernas es bueno para el tamaño del modelo. Destaca especialmente la altura al techo, incluso para personas de notable estatura que superan los 1,85 metros.

La plaza central es cómoda, pero presenta las clásicas limitaciones. Son el túnel de transmisión, las salidas de ventilación posteriores y un mullido algo más duro a causa del reposabrazos central. Me gusta el hecho de que cuente con una trampilla de acceso al maletero. Esto nos permite cargar objetos largos o acceder al equipaje.

El Golf 8 mantiene un maletero con 380 litros. Es igual al del Serie 1 y el A3. Si abatimos los asientos -60:40-, el volumen asciende a 1.237 litros. Destaca por su modularidad. Ofrece unas formas muy regulares, iluminación, ganchos y un piso ajustable a dos alturas. Puede equiparse una rueda de emergencia. El borde de carga queda situado a 650 mm del suelo.

Por primera vez se utilizarán ocho versiones diferentes de propulsión en el Golf. La gama incluye opciones de gasolina, diésel, Mild Hybrid e híbridas enchufables. Todos los motores de gasolina y diésel son de inyección directa y turbo. Además, se ha desarrollado una eficiente caja de cambios manual de seis marchas completamente nueva.

Estas son todas las combinaciones posibles:

Para la prueba he optado por el 2.0 TDI de acceso. Se trata de un bloque fabricado en hierro y aluminio con un desplazamiento de 1.968 cm³. Equipa dos árboles de levas en la culata, inyección directa por conducto común, turbo, geometría variable e intercooler. Entrega 116 CV (85 kW) entre 2.250 y 4.400 rpm; así como un par motor de 300 Nm entre 1.600 y 2.500 rpm.

Como veis, son cifras modestas que se entregan en un rango bastante limitado. Pese a ello, resultan suficientes para moverse con agilidad dentro y fuera de la ciudad. Eso sí, en ciertas circunstancias requieren que juguemos constantemente con el cambio para tener un buen empuje. Es el caso de los adelantamientos rápidos o los puertos de montaña.

Circulando a 120 km/h en sexta velocidad el motor gira a 2.000 rpm, momento en el que ya entra en acción el turbo. Gracias a ello, no le cuesta mantener sin esfuerzo la velocidad de crucero, incluso yendo cargados. Para la mayoría de los usuarios, las cifras de esta versión serán más que adecuadas para un uso racional y polivalente del vehículo.

Para que os hagáis una idea, es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 10,2 segundos. Recupera de 80 a 120 km/h en 6,4 segundos (en 4ª velocidad) y alcanza una velocidad punta de 202 km/h. Personalmente, considero que esta mecánica es muy recomendable si no necesitas altas dosis de potencia, conduces tranquilo y quieres obtener unos excelentes consumos.

En esencia, este Golf brinda un gran equilibrio prestaciones-consumo. Adicionalmente, el selector de modos de conducción nos permite elegir entre cuatro opciones. Estas modifican diversos parámetros del vehículo. Es el caso de la respuesta del acelerador, la dureza de la suspensión y de la dirección… Encontramos los modos Normal, Sport, Eco e individual.

Como decía, lo que más te va a gustar son los consumos. Volkswagen homologa un combinado de 4,2 l/100 km WLTP. En una conducción real es fácil moverse en torno a los 4.5 litros en carretera y 6.5 litros en ciudad. La media tras más de 1.000 km recorridos en todo tipo de escenarios fue de 5.3 l/100 km. El depósito de combustible es de 50 litros (12 de AdBlue).

Me ha gustado también el tacto del cambio manual de seis velocidades. Brinda un tacto de la palanca y del pedal adecuados, ni demasiado blandos ni excesivamente duros. Además, presume de un escalonamiento equilibrado, unos recorridos intermedios y un guiado preciso. Por último, destacar que las relaciones del cambio hacen la mecánica bastante elástica.

Hablar del Volkswagen Golf siempre es hablar de equilibrio. Se trata de un producto prácticamente redondo en comportamiento que, en esta entrega, se mantiene en su línea. Lo cierto es que en el día a día es difícil apreciar la mejora del conjunto. Es más notable en largos viajes, ya que ha ganado sensiblemente en confort y en calidad de rodadura.

No se venden tantas unidades del Golf sólo porque sea un coche bonito y casi premium; sino porque es capaz de aunar comodidad y ciertas prestaciones dinámicas. Esto le convierte en uno de los modelos más polivalentes del segmento. No destaca en ningún aspecto, pero cumple con nota en todos ellos. Da la impresión de ser un producto de calidad, con empaque.

En ciudad, la visibilidad es buena en todos los ángulos, pues la superficie acristalada es generosa. Además, cuenta con cámara de marcha atrás y sensores de aparcamiento para ayudarnos con las maniobras. En cualquier caso, no es un coche que por sus dimensiones la requiera. Su diámetro de giro entre paredes se mantiene en 10,9 metros.

En mi humilde opinión, a la dirección le falta algo de dureza y le sobra asistencia.

A la hora de enlazar curvas, responde con precisión y con unos cambios de apoyo rápidos y naturales. Los ingenieros han logrado un gran equilibrio entre el tacto de la dirección y el tarado de las suspensiones. Es algo que ya pasaba en el Golf 7. La puesta a punto hace que se sienta más ágil que muchos rivales y que la carrocería apenas balancee.

Las reacciones son nobles, seguras y aportan cierta diversión. Se agradece cuando le buscamos las cosquillas al coche. En cualquier caso, donde me ha terminado de convencer el conjunto es en autopista. La calidad de rodadura, el aislamiento del habitáculo y la gran sensación de aplomo consiguen que te sientas realmente cómodo y seguro al volante del Golf.

Para el equipo de frenos, monta discos ventilados en el eje delantero y discos macizos en el trasero.

Como compacto, dirección, chasis y suspensiones -McPherson delantera y paralelogramo deformable- logran un gran conjunto. De los mejores del segmento diría, especialmente si equipamos el DCC. La suspensión adaptativa reacciona permanentemente a la calzada y a la situación de conducción. Tiene en cuenta los procesos de dirección, frenado y aceleración.

En materia de asistencias a la conducción y de seguridad, no falta el nuevo «Travel Assist». Este permite la conducción asistida hasta 210 km/h. Además incluye control de crucero adaptativo, asistente de mantenimiento de carril, asistente de colisión frontal con detección de vehículos, peatones y asistente de esquiva; alerta de tráfico cruzado trasero y asistente de aparcamiento, entre otros.

El funcionamiento del asistente de carril es algo más brusco que, por ejemplo, en el Audi A3 Sportback.

El nuevo Volkswagen Golf también cuenta con Car2X, un sistema que hace que el modelo sea el primer Volkswagen en Europa que intercambia información relevante para el tráfico con otros vehículos (no tienen por qué ser VW) y las infraestructuras de tráfico en un entorno local de hasta 800 metros. Este intercambio de información tiene lugar en milisegundos.

Volkswagen ha reconfigurado la gama de acabados. Ahora tenemos los Life y R-Line. Desde el básico equipa en materia de seguridad faros LED, alerta de cambio de carril, frenada automática en ciudad, aviso pre-colisión, detector de peatones y fatiga, bloqueo electrónico del diferencial XDS, control de crucero adaptativo con limitador, freno de mano eléctrico y asistente al arranque en cuestas.

También de serie son el climatizador automático de una zona, volante multifunción, instrumentación digital configurable, cuatro elevalunas eléctricos, arranque por botón, encendido automático de luces, sensor de lluvia, apoyabrazos central delantero y llantas de aleación de 16 pulgadas e iluminación ambiental exterior con proyección del logotipo en el suelo.

Tampoco faltan carga inductiva del smartphone, integración inalámbrica del iPhone, una iluminación ambiental interior en 10 colores, un reposabrazos central delantero, «ParkPilot», climatizador trizona y luces de autopista y de ciudad activadas automáticamente.

El sistema multimedia posee una pantalla táctil de 8 pulgadas, bluetooth, varias tomas USB (también en las plazas traseras), Android Auto, Apple CarPlay, App Connect, mandos en el volante para su control, seis altavoces, sistema de llamada de emergencia eCall… El navegador es opcional.

Además de un diseño exterior específico, el R-Line destaca por su oferta de equipamiento. Este subraya la deportividad con elementos como los asientos deportivos de tipo «Bucket», un volante deportivo con controles táctiles, Park Assist, SmartBeam, faros LED Performance con luz de curva y tren de rodaje deportivo, entre otros.

La dotación de serie también contempla las llantas de aleación de 17 pulgadas, climatizador automático de tres zonas, control de crucero adaptativo, instrumentación digital configurable, cuatro elevalunas, espejos eléctricos, sensor de lluvia, alerta de cambio de carril, detector de fatiga, acceso sin llave, arranque por botón, navegación…

Por otra parte, Volkswagen continuará trabajando en lo que han bautizado como la «reequipación», y es que el Golf llevará en muchos acabados equipos de serie cuyas funcionalidades podrán ampliarse en un futuro bajo pago y demanda del cliente. Lo conoceremos como «We Upgrade» y en este enlace puedes encontrar más información.

En España, los precios recomendados para la gama del Volkswagen Golf 2022 sin descuentos ni promociones arrancan en 32.005 euros para el Golf 1.0 TSI de 110 CV. El modelo objeto de la prueba, un Volkswagen Golf 2.0 TDI de 115 CV con caja de cambios manual de seis velocidades, tiene un precio de partida de 32.965 euros sin descuentos ni promociones.

La octava generación del Volkswagen Golf se presenta en el mercado muy mejorada en lo que a equipamiento y tecnología se refiere, aunque es cierto que su exterior luce un diseño bastante continuista. Está disponible solo en carrocería de cinco puertas y con mecánicas diésel, gasolina, mild hybrid y PHEV. Tiene un precio algo superior al de los generalistas, sin alcanzar el segmento premium.

Descúbrelo inmediatamente, sin registro y totalmente GRATIS:

Selecciona año de matriculación

Todos los campos son obligatorios

Queremos saber lo que piensas, ¡Comenta a continuación!

Autonocion.com es una página dedicada a las noticias del motor con servicios online del automóvil.

Recibe las noticias en tu correo cada 3 días:

Al enviar tu correo permites que autonocion.com te envíe noticias o promociones. + info aquí

Autonoción® 2011-2022 Todos los derechos reservados

Síguenos en nuestras redes sociales